Yo comía un plato de fideos rojos muy delicioso
Tú me miraste
Sentí que me miraste
Y tu mirada era tierna
Qué gusto y placer
Sonaba Chica de oro y la estábamos apreciando
Porque cuando estamos así nos juzgamos y lokeamos roleando un bate y todo se convierte en arte
El cielo se ve rojo brillante y morado
El ambiente está fresco
Estamos notando la diferencia de la voz entre un video y la versión de estudio de la canción
Y la música sonaba mil veces mejor en el video
Pero la voz de la versión de estudio era mejor
Y pues deberían ser intercambiados
O no
Simplemente son distintas
Más o menos bien de todos modos
Todo en esta vida es posible
Por eso cuando juntes fuerzas las cosas van a estar mucho mejor
Y volverás a empezar como Kimmy
1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10.
Pero creo que hay que desesperar
Sí debe ser eso
sábado, 8 de diciembre de 2018
Sheni
sábado, 18 de agosto de 2018
Joyeux anniversaire
Empiezas a hablar. No basta. Ninguna palabra aislada será suficiente, partes con eso. Desplazas tu silencio, confías en la sintaxis y sus redes, recuerdas: dos barras de madera al final de un cerro escarpado, mirando ansiosas el cerro del frente, dispuestas a saltar pero sin los medios (los miedos) para hacerlo; alguien, casi llamado a hacerlo, alguna vez puso una tras otra y otra, por la maravilla de alargar cosas, hasta llevarlas al otro lado. Esta persona no podía saber lo que era un puente, solo maderas ansiosas puestas una frente a otra, no se veía en ellas ni su trama; se dio la vuelta, regresó. Otra, tiempo después, las vio de nuevo (era una mirada distinta) y las cubrió de metal, por la maravilla de hacer brillar cosas, y olvidó las maderas. Años después, alguien las recordó (aquí empezaron ya a vivirse las maderas) y colocó un tranvía exportado: un puente al fin, pensado como tal en el momento en que una familia lo cruza por primera vez, la maravilla de cruzar inaugurada. Tú llegaste inevitablemente tarde, los trenes fabricados en masa y ya vistos desde todos sus ángulos, incluso renderizados en 3D sobre una malla de líneas azules; los rieles saturados de sostener tantas vueltas; las maderas cubiertas, tan obvias que casi impensables; la imagen del puente y sus trenes en movimiento tan conveniente (convincente), obligada a decir ‘‘estoy para que cruces’’. Ya no hay nada que ver, de modo que ves tu mirada, y de pronto (una realización inmediata, extemporal) caes en cuenta de que la infraestructura y las memorias del puente están en ti y te pesan como una extremidad muerta. Vuelves a la imposibilidad de hablar, pero tu mirada rescata el silencio significativo de las maderas.
AG - une nuit de folie
martes, 17 de julio de 2018
When you're like 16, everything rushes around you, rage, happiness, love and life. Every situation happens so fast, you can't even understand whether you feel angry or fine. But it's just a matter of time before you can start to work it out. By the time you're in your twenties, you just become a mixture of feelings, because the young rebel part of you is fighting against the deep grown up thoughts. Don't be afraid of despair, situations like those are made for us to strengthen and improve. Please keep up, don't fall.
domingo, 15 de julio de 2018
Thought 1
Si me miro en el espejo while high, no voy a mirar lo que estoy haciendo, mirarme al espejo será lo que esté haciendo.